Sólo esta semana escapa del bullicio que caracteriza a otros cultos, con la misma fiel expresión de otras fiestas. La ciudad permanece quieta y tranquila, viviendo intensamente el drama del calvario; resaltando las procesiones nocturnas.
Domingo de Ramos: que recuerda la entrada triunfal del señor de Jerusalén. Sale de la Iglesia de Santa Ana representando a Jesús, montado en un pollino vivo, siendo el animal casto y de exclusividad de uso para este fin, dicha expresión recorre longitudinalmente casi toda la ciudad, de oriente a occidente. En todo el recorrido no falta el ingenio andino expresado en alfombras de flores naturales por donde recorre el Señor montado en el asno blanco; concluyendo su trayectoria en el barrio de Ascensión.
Lunes Santo: sale en procesión la efigie de Jesús preso por los judíos “Señor del Prendimiento” (imagen que alcanza los 2,1 m de altura) de dignísima humildad y dulzura infinita, que cautiva el espíritu y enternece el corazón, haciendo brotar de los ojos lágrimas de amor, de arrepentimiento y de compasión.
Martes Santo: conmovedora imagen es la que se presenta en procesión del “Señor de los Azotes”, es una de las más culminantes del doloroso martirio de nuestro Señor Jesucristo, haciendo el recorrido de la Iglesia de Santana, pasando por las principales arterias de la ciudad para luego retornar a la iglesia de origen.
Miércoles Santo: la impresionante efigie del “Señor de Nazareno”, cariñosamente llamado “Villa Señor”, quien es llevado en andas de la Iglesia Catedral, portando la cruz, representando la caída donde Cirineo lo ayuda a cumplir con parte de su recorrido, esperando en las inmediaciones de los portales de la Biblioteca Municipal; en paralelo a ello, de la Catedral sale en anda San Juan que va a su encuentro y haciendo tres reverencias al Señor se marcha para colocarse delante; seguidamente llega la Virgen Verónica, quien luego de la consiguiente reverencia le arroja flores del delantal; dejando traslucir el rostro del Señor; quien se ubica inmediatamente luego de San Juan y finalmente llega el SOLEMNE ENCUENTRO, entre la Virgen de los Dolores y Jesús de Nazareno, donde el público se arrodilla, guardando silencio por algunos minutos, para luego continuar con la procesión en el orden siguiente: San Juan, La Verónica, Jesús de Nazareno y la Virgen Dolorosa, regresando posteriormente a la Iglesia de origen.
Jueves Santo: institución de la Sagrada Eucaristía y del Sacerdocio Católico, solemne Misa de la “Cena del Señor” y traslado del Santísimo Sacramento al Monumento Eucarístico. Hora Santa en la Catedral y templos parroquiales, visita de monumentos, vela eucarística en la Catedral. Visita de templos para ganar las indulgencias necesarias.
Viernes Santo: a las 15.00 en las diferentes Iglesias en forma sincronizada celebran misa de tres horas. Esta misa es conocida con el nombre tradicional del SERMÓN DE LAS TRES HORAS, continuando con la procesión de la Virgen Dolorosa y el Santo Sepulcro, que sale de la capilla de la Dolorosa, su trayecto es acompañado por la Hermandad de los Caballeros del Santo Sepulcro, autoridades civiles, militares, religiosas y pueblo en general.
Es costumbre elegir en la puerta de la Capilla a una persona que será el mayordomo para que se haga cargo al año siguiente de la organización; en coordinación con los miembros de la hermandad.
Sábado de Gloria: en horas de la mañana se darán las celebraciones de la Vigilia Pascual bendición del fuego, del cirio pascual, del agua bautismal, celebraciones eucarísticas, repique de campanas de todos los templos comunicando la resurrección de Cristo. Aleluya, Aleluya. Este día desde tempranas horas los negociantes se instalan en el campo ferial; dando inicio a la feria comercial, ganadera, artesanal, agropecuaria, donde el visitante podrá disfrutar del tradicional “Cuchuscha” o trompeo organizado por los campesinos de las diferentes comunidades.
Es una fecha propicia para saborear la deliciosa pachamanca.
Domingo de Pascua de Resurreción: a las 4.00 luego de las funciones litúrgicas, se da la procesión matinal de la imagen de Cristo Resucitado, quien en el trayecto se encontrará con la Virgen María. Concluyendo la procesión en la Plaza de Armas, con la quema de un muñeco representativo de Judas en presencia de la población.
Durante la semana en los portales de la Biblioteca Municipal, es característico la venta de platos típicos, así como los suculentos ponches, igualmente los días sábado y domingo se da la gran final de carrera de caballos, donde intervienen los bravos y aguerridos “Chopccas”. Estas carreras se inician en el mes de enero, compitiendo domingo tras domingo